🕵️♀️ Desentrañando el Modus Operandi: Los 3 Objetivos Clave del Delincuente
Cuando nos enfrentamos a un caso de investigación criminal, uno de los conceptos más importantes a tener en cuenta es el modus operandi (MO) del delincuente. Pero, ¿realmente conocemos a fondo la verdadera naturaleza y alcance de este término?
El modus operandi, que en latín significa modo de operar, va mucho más allá de simplemente entender la mecánica de cómo se cometió un crimen. De hecho, este concepto encierra tres objetivos fundamentales que persigue el criminal al llevar a cabo sus actos delictivos.
📌 Objetivo 1: Proteger su identidad
Para un delincuente, la prioridad número uno es evitar ser identificado y relacionado con el crimen que ha cometido. Esto se debe a que, una vez que las autoridades logran vincular a un sospechoso con la escena del delito, se vuelve mucho más sencillo proceder con la investigación y eventualmente lograr su captura.
Por ello, los criminales suelen emplear toda una serie de tácticas y comportamientos dentro de su modus operandi para proteger su identidad. Esto puede ir desde el uso de máscaras y guantes, hasta acciones más extremas como eliminar testigos mediante el asesinato de la víctima. De esta manera, buscan evitar dejar rastros que puedan conducir a su identificación.
Imagina, por ejemplo, a un ladrón que roba una joyería. Para proteger su identidad, podría utilizar una máscara y guantes, y luego huir en un auto robado previamente, con el fin de dificultar su rastro y evitar ser vinculado al crimen.
📌 Objetivo 2: Asegurar el éxito del delito
Pero el modus operandi de un delincuente no solo se enfoca en ocultar su identidad, sino también en garantizar que logre completar con éxito el acto criminal que ha planeado.
Para ello, los criminales suelen emplear toda una serie de tácticas y herramientas que les permitan someter a la víctima y evitar que esta pueda resistirse o pedir ayuda. Esto puede ir desde el uso de armas de fuego o blancas, hasta el empleo de sustancias químicas para drogar a la víctima.
Un ejemplo de esto podría ser un violador que utiliza somníferos para incapacitar a su víctima y así poder cometer su crimen sin que esta pueda ofrecer resistencia.
📌 Objetivo 3: Facilitar la huida
Por último, pero no menos importante, el modus operandi de un delincuente también tiene como objetivo asegurar su escape exitoso de la escena del crimen. Después de todo, de nada serviría haber cometido el delito con éxito si luego no pueden evitar ser capturados por las autoridades.
Para lograr esto, los criminales suelen emplear tácticas como tener un vehículo preparado para la huida, o incluso robar un automóvil en el momento para dificultar su rastro. Esto les permite alejarse rápidamente del lugar y evitar ser interceptados por la policía.
Un ejemplo de esto sería un asaltante que, después de robar en una tienda, roba también un automóvil para poder escapar más fácilmente y evitar ser atrapado.
❗ Entender estos tres objetivos fundamentales que persigue un criminal al emplear su modus operandi es clave para la investigación criminal. Conocer estos patrones de comportamiento nos permite anticipar sus próximos pasos y recopilar evidencias clave para resolver el caso.
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